NO ME LO CALO MÁS

No quería escribir en estos días tan agitados. De hecho, tengo tiempo sin escribir porque la política estaba afectando mi serenidad. El verte inmerso en un país con los problemas y gobernantes que tenemos, elimina de raíz la tranquilidad, la esperanza y la calidad de vida de muchos, o por lo menos la mía.

Sobre todo te hace pensar que nada de lo que hagas, pienses o escribas, va a cambiar la realidad. Pero hoy, me estoy dando cuenta que he estado equivocada este último año.

Los estudiantes me hicieron abrir los ojos. El miedo de los sectores populares, me hizo abrir los ojos. La indiferencia de la sociedad civil, me hizo abrir los ojos.

TODOS sumamos señores, y si queremos que los muertos de estos 16 años (porque recordemos que Chávez empezó en 1998), y en especial los de estos días de protesta no queden en vano, tenemos que tomar acciones de calle, sumar y ser contundentes con nuestro mensaje: NO QUEREMOS SEGUIR VIVIENDO ASÍ.

Porque no pana, no quiero tener que ir al supermercado y hacer una cola de dos horas para comprar unas verduras. Porque no quiero tener que comprar cemento de contrabando para terminar mi casa. Porque no quiero tener que decirle a mis clientes que se traigan X o Y objeto del extranjero para cumplirle con un pedido. Porque no quiero que los enfermos estén cazando medicamentos. PORQUE NO QUIERO VIVIR CON MIEDO A QUE ME MATEN EN UNA ESQUINA.

Porque no me la calo más. No quiero vivir así. Y punto.

Por eso volví a escribir, porque es necesario que TODOS los venezolanos sepamos, que así como muchos están dejando su sangre por recuperar la libertad, pues tenemos que sacrificarnos y quitarnos el miedo de encima. Tenemos que salir a luchar por este país, porque si no esto es solo un abreboca muy bonito de lo que vamos a comenzar a vivir.

Salga a marchar, escriba pancartas, envíe mensajes de textos, ayude a enviar información por Twitter, aporte ideas, imprima volantes, arme guarimbas, averigüe quienes son los heridos o detenidos, llévele comida a los familiares de presos, visite los barrios, rece el rosario, haga lo que mejor le convenga, pero HAGA.

Venezuela necesita que todos demos nuestra cuota de sacrificio; necesita que seamos valientes y le demostremos a esta tierra que estamos orgullosos de haber nacido en ella. Que llevemos a la realidad todos esos mensajes y fotos bonitas que ponemos en las redes.

Hagamos algo estos días obligados de “descanso”, porque si no, nos cansaremos de lamentarnos por una eternidad de dictadura. Nacimos en el mejor país del mundo, en el peor momento de su historia. Queda en nosotros cambiarla… Dios nos bendiga.

Marielisa Manzanilla