Escribo estas cortas líneas, en esta ocasión, para manifestar mi repudio ante tanta pasividad e indiferencia por parte de los larenses. Van más de dos semanas que nuestra Divina Pastora fue violentada por personas sin escrúpulos, más de dos semanas sin conocer un culpable, más de dos semanas sin que las autoridades hagan pagar a quienes dañaron propiedades públicas, más de dos semanas con la Virgen llorando, más de dos semanas que borraron nuestra memoria.
¿Cómo es posible que ni siquiera el fervor mariano del pueblo larense, haya hecho que nos uniésemos para exigir a las autoridades el castigo a los culpables? ¿Cómo es posible que la Iglesia haya tomado el asunto a la ligera? ¿Nadie reclama, nadie protesta, nadie se indigna? Pareciera que el tiro en la cara de la Divina Pastora pasó hace mucho tiempo…
Y es que si no exigimos justicia ante un hecho tan abominable como éste, en donde hirieron nuestra Madre del Cielo, ¿qué quedará entonces para el país? Estoy indignada y triste ante una sociedad adormecida, ciega, sorda y muda –como la canción de Shakira–, un pueblo que gracias a su corta memoria y a su pasividad, ha dejado pasar hechos repudiables y destructores como este.
Perdónanos a todos Virgencita, perdónanos por no luchar por ti. Perdónanos por ser tan pasivos. Perdónanos por haber entregado a tu hijo para que nos salvara y no poder nosotros, siquiera, defender tu imagen. Perdónanos porque no sabemos lo que hacemos.
Sin duda alguna, tenemos el país que nos merecemos, la injusticia que merecemos y la destrucción que merecemos. Quien no defiende a su madre, no puede defender correctamente sus ideales…
Marielisa Manzanilla
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